A lo niños no les gusta admitirlo pero quieren reglas claras y padres que sean consecuentes para hacer que se cumplan.
Por ejemplo lávate las manos antes de comer, es una buena norma y le ayuda a su salud y poco a poco sabrá que antes de comer deberá lavarse las manos, siempre y cuando insistas.
Claro que de vez en cuando los padres podemos portarnos flexibles con ellos pero en lo posible trata de volver a implementar tus reglas y normas en casa.
Los padres comúnmente cometemos el error de imponer una regla y después olvidarla entonces es donde los hijos se dan cuenta que quizá llorando, haciendo berrinche o enojándose tu les concederás lo que quieran, trata de ser firme y que esto no te ocurra ya que los hijos solo esperan que tu te descuides para poder saltarse las reglas de casa, les encanta hacer eso.
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