Si bien es cierto hasta los seis o siete años de edad los hijos no van a pedir su habitación propia para tener su intimidad, es por eso tan importante aprovechar las primeras muestras de independencia para señalarle a tu hijo la posibilidad de disponer de su propio espacio y sobre todo ofrecerle un cajon para guardar sus cosas como cuentos, juguetes.
Es importante también ser flexibles como padres ya que este desapego es difícil para nuestros hijos así que el día que no quiera dormir en su habitación y quiera estar en la cama de mama y papa debes dejarlo considerando que solo sera una noche después tendrá que regresar a su propia cama.
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